domingo, 18 de septiembre de 2011

El Chacal agoniza en París: Villagers en vivo desde La Maroquinerie.

Anunciado como uno de los final dyings breaths of the Jackal, se encuentra disponible el concierto que Villagers ofreció en La Maroquinerie de París, el pasado 11 de Abril del 2011. La presentación que Conor J O´Brien y sus huestes dieron esa noche fue filmada bajo la dirección de Stéphane Douillard, para después ponerla a disposición de todos nosotros por medio de la página de Youtube de Le Hib00.

http://www.wearevillagers.com/2011/08/02/villagers-in-concert-at-la-maroquinerie-paris/

El set de esa noche se filmó en un clásico, pero efectivo, blanco y negro. Una combinacion que ayuda a resaltar la intimad del evento. Con unos Villagers casi a ras de piso -sólo a medio cuerpo arriba de los espectadores- y con un excelente estado de animo, la casi hora y media del concierto fluye de manera natural. El repertorio de la noche está compuesto por casi toda la oncena de canciones (excepto That Day) que dan cuerpo al debut de Villagers: Becoming a Jackal (2010, Domino Records). Además de que se pasa revista a Down Under The Sea y On A Sunlit Stage (esta cierra la noche por cierto) canciones que pertenecen al Ep Hollow Kind y a un sencillo, respectivamente.















El repaso que, aleatoriamente, los Villagers dan a su debut del 2010 es muy bueno. El en vivo de The Meaning Of The Ritual supera esta tensa calma que suena en el Cd, y lo hace recurriendo a un cierre más intenso donde la voz en falsete de Conor se contrapone a un sintetizador que emula el sonido de un juego de cuerdas. Por su parte Home recibe un tratamiento más eléctrico; algo a lo que los asistentes responden muy bien. Entre las canciones que no se alejan tanto del sonido y de los arreglos con los que fueron gradadas, podemos contar a Twenty Seven Strangers, Set The Tigers Free ("esta es una hermosa canción" dice O´Brien), I Saw The Death (con Conor al piano), Pieces y Becoming a Jackal -aquí si me hubiera gustado un enfoque más explosivo, algo que ayude  liberar la furia que, a mi parecer, reside en la canción-.



Además de lo musical, el concierto está lleno de detalles que lo hacen aun más agradable. Están presentes todas esas pequeñas cosas que marcan la gran diferencia entre lo qué es la música grabadaen estudio y su ejecución en vivo. Esa noche de Abril en La Maroquinerie de París está plagada de cosas como el apresurado cambio de afinación en las guitarras entre canción y canción, o de esas partes de la letra que se cantan lejos del micrófono y que suenan como si las entonara la persona más alejada del escenario. También podemos ver la interacción entre O´Brien y el público -siempre pensé que el multi-instrumentista era un poco más reservado-, así escuchamos como se disculpa con los asistentes y, en un decente francés, les dice que se encuentra enfermo. El buen humor del cantante contagia a los fanáticos, y les arranca las risas con presentaciones como: "Esto es lo más cerca que jámas estaremos de Buddy Holly"; entonces comienza a sonar The Pact (I´ll Be Your Fever). Si bien es cierto que la experiencia de la presentación en vivo nunca es completa, ya que el concierto lo vemos en la comodidad de nuestro hogar y no en un pequeño club, aun así el director Stéphane Douillard logró captar la intimidad de este foro parisino.

Si la intimidad captada en video y el repaso a los clásicos de la banda no fueran suficientes incentivos para darle play al concierto, entonces para los que ya somos fanáticos de este grupo-proyecto-solista de Conor J O´Brien, tenemos el plus de que el concierto es engrosado con un puñado de canciones un poco más desconocidas y otras nuevas. El concierto abre con Cecelia And Her Selfhood, canción de corte intimista, y que durante un poco más de la mitad de su duración es cantada a capella; para cerrar acompañada solamente por un tímido rasgueo de guitarra.
Las novedades siguen apareciendo. Para el cuarto número de la noche O´Brien le dice a su cautiva audiencia (que también somos nosotros) que "esta es una nueva canción": llega The Bell. Novedad por donde quiera que se le escuche. La canción deja ver el lado más salvaje de Villagers, ya que aquí el empuje de lo eléctrico toma la batuta, mientras que lo acústico queda relegado a mero acompañamiento -algo totalmente opuesto a la dinámica que guía Becoming a Jackal-.


Después de una excelente ejecución de Ship Of Promises, ejecución que aunque apegada al sonido del Cd, deja salir la actitud más rockera de la banda, llega el encore. Para acallar los aplausos de los asistentes (a diferencia de México, allí nadie grita ¡Otra! ¡Otra!, ni corean un afrancesado ¡Villagers! Oe, oe,oe,oe) Conor sale acompañado de su guitarra y toca Memoir. Esta canción fue escrita por el lider de Villagers, pero vería la luz cinco días después de ese concierto (hasta el 16 de Abril) en voz de la francesa Charlotte Gainsbourg en un 7" que esta mujer compartió con O´Brien.
Acto seguido... mmmm ni tan seguido, ya que el comienzo de In A New Found Lad se ve interrumpido, primero, por la cegadora luz de un flash y después por los mocos y el sudor del buen Conor J. Ya por fin en marcha, la nueva canción In A New Found Land sigue con la tónica de Memoir, es decir, ese folk susurrante que le conocemos tan bien a Villagers, y del cual hizo gala el pasado 11 de Marzo en la corta sesión que grabó para la página Daytrotter.
http://www.daytrotter.com/dt/villagers-concert/20040448-37382429.html


Como ya se había dicho el cierre de la velada se auncia con la nota final de On A Sunlit Stage, y llega con el último aplauso de los afortunados que estuvieron presentes esa noche. Como veo aun muy lejano que Villagers se presenten en este lado del mundo, sólo me queda dirigir el cursor hacia donde una flecha le juega a ser vibora, y trata de morderse su propia cola mientras grita "Replay".